Nunca pensé en festejar el día del Periodista. No es algo que haya estado en mis planes o en mis sueños de infancia; aunque confieso que jugaba a hacer radio con mi vecino desde muy chica. Siempre me gustó escribir, y empecé a estudiar la carrera de Comunicación Social, en la Extensión Lincoln de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la ciudad de La Plata. Un gran placer ser fruto de la educación pública que, por aquellos años, se amplió por el territorio bonaerense.
Mi idea era trabajar en un diario algún día… eso sí me entusiasmaba. Cuando empecé a cursar, transité algunas desilusiones con mi escritura. Me di cuenta que tenía mucho para corregir. Tenía muchas cosas para decir, pero les faltaba forma a esos textos. Párrafos muy largos, ideas redundantes y poco concretas fueron las primeras cuestiones a trabajar. Mientras dedicaba tardes enteras a la lectura de cuentos policiales para mejorar descripciones y diálogos, esperaba mejorar… porque siempre se ha dicho que uno aprende a escribir, leyendo. Ampliábamos vocabulario, formas y estilos que sin querer se iban impregnando en nuestra propia escritura. Del mismo modo que cursaba Talleres de Gráfica y Literatura; aparecieron en la currícula los Talleres de Radio. Y así encontré la identificación mas fiel a mi estilo. Comunicativa, reservada, promotora de la imaginación, se ganó mi cariño y mi confianza. Empecé a realizar los primeros programas con mis compañeros, en el marco de las prácticas del Taller, en Radio Lincoln “La Pionera”, propiedad del generoso Ricardo Bay. Mientras cursaba Periodismo en Lincoln empecé con mis primeros programas en FM Eclipse 104.3, los días sábados, porque durante los fines de semana, viajaba a Los Toldos. Todo esto, allá por el 2001.
Empecé a ser feliz en una radio. Una vez recibida, llegaron los programas diarios, algunos muy temprano, con entrevistas, noticias, flashes y la buena música de la FM. En ese momento también surgió la posibilidad de dar clases en la Escuela Secundaria, y volví a mi querida Escuela Normal, ahora como docente.
Después tuve algunas experiencias en el Periódico local Impacto, con la apertura y buena predisposición de Roque Pagliaro, que tenía su bella redacción en la calle 6 de Agosto.
De la mano de los proyectos radiofónicos en FM Eclipse, surgió un proyecto audiovisual innovador para la época: “Agromóvil”, que se emitía todos los miércoles por Cablevisión, después de Nuestras Noticias, con los mejores comentarios que nos brindaba Ricardo Artigas. Hicimos 12 programas sobre actividades rurales de nuestro distrito: siembra, cosecha, cría de cerdos, feedlot, arándanos… Entregábamos en cassette VHS cada programa…. Qué épocas! Alguno de Uds. lo recordará… Duró solo ese tiempo.
La radio y la escuela convivieron en mi vida profesional. En un determinado momento, elegí quedarme sólo en la Escuela, dando clases de Comunicación y Periodismo, tanto en Secundaria, Adultos y carreras terciarias.
En esos tiempos surgió en Los Toldos un proyecto periodístico gráfico sin precedentes: Lamanuelamolina. Con Tony Adamini como director fundador y Andrés Lorenzo como genio diseñador, nace una revista destacada en la historia del Periodismo local. Ellos me invitaron a formar parte de aquel sueño, a pensar las primeras secciones y escribir las primeras notas. Realizábamos largas entrevistas con personalidades destacadas de nuestra ciudad: recuerdo especialmente las entrevistas a Pirula Villa, Juan Carlos Bartoletti y Elio Torregiani. Ninguna menor a dos horas de grabación. Fueron tiempos de mucha adrenalina y producción.
Cuando llega el tiempo de la maternidad a mi vida, estuve un poco alejada de los medios, costaba más concentrarse, dedicar tiempo…. Había otras prioridades, así lo sentí, y me permití disfrutar de una etapa muy esperada.
Nunca dejé mi trabajo en la Escuela, fue continuo desde que empecé. Trabajando en el nivel Secundario se presentó una oportunidad única y especial: estar a cargo de la FM Escolar Identidad 93.1 junto a mi compañera Adriana D’orsi. Este proceso fue super valioso. Hacer radio con adolescentes y estudiantes en general, fue una de las experiencias más significativas que me brindó la docencia. Fueron años de mucho crecimiento, en varios sentidos. Cuando ese trabajo se terminó, la radio siguió viva en mí como nunca…. En realidad, como siempre….
Así empezó a gestarse “Radar” como programa de radio. Con la necesidad de no perder el vinculo con esta pasión. Radio Centro me abrió las puertas… con Fernando Pérez aprobando nuestra propuesta…. como ya lo había hecho alguna vez… allá por los tiempos de LaManuelaMolina…. Con Lucho como Operador, como aquella vez… le pusimos información y buena música a la mañana de los sábados. Radar empezó a salir en vivo en abril del año pasado, con la compañía de Fran Parodi haciendo Deportes, durante esa temporada.
Hoy continuamos con Radar, al que hemos sumado esta página web, que viene a completar un proyecto periodístico que surgió en pandemia, cuando todos queríamos hacer cosas nuevas o distintas para paliar el “tiempo libre” y los malos pensamientos que a veces nos dejaba el aislamiento. En esos primeros pasos, acompañó mis ideas Terapia Emprendedora, con Luciana Albornoz, como mentora de asesorías geniales. Con algunos colegas empezamos a intercambiar charlas sobre cómo instalar una página web, y todos han sido muy generosos en sus recomendaciones y aportes.
Así nace Radar digital, con el asesoramiento de Lucas Fernández. Los diseños de logos, tanto en la radio como en la Web, son de la gran Celeste Leguizamón.
En cada una de las producciones de hoy, hay un poquito de cada experiencia vivida, de cada persona con la que compartimos una idea, una acción… un proyecto. Porque nada se logra solo en esta vida. Todo es producto del trabajo en equipo, que te desafía en cada emprendimiento.
Gracias a cada uno y cada una, hoy estoy escribiendo estas líneas en un portal digital como este. Han dejado en mí la huella que me permite avanzar… Hoy estoy convencida que periodista se nace y se hace. Día a día. Sin pausas. Animándonos a aprender en cada acción y en cada pequeño progreso.