El Museo Histórico regional Meinrado Hux, fue inaugurado en 1962 por el padre Meinrado Hux. La apertura coincide con los 100 años de la llegada de la tribu de Ignacio Coliqueo a Los Toldos. El museo cuenta con un caudal documental mas que importante, que lo convierten en uno de los principales en materia de archivo de la historia indígena en la provincia de Buenos Aires.
En una entrevista para radarcentro965, durante la pasada Semana Santa, Fernando Cocchi, encargado del mismo, comentó: “Encontramos que Meinrado además de historiador, fue monje, docente, escritor, musico. Meinrado trabajo durante más de 6 décadas con la investigación sobre cuestiones indígenas y la comunidad local de Los Toldos, con la región, y con algunos grupos de pueblos originarios de la Provincia de Bs. As. y también de la Patagonia. Su trabajo es muy grande y abarcó muchísimos temas. Nuestra idea entonces fue generar un espacio dinámico, que los temas que él trato puedan ser reorganizados, reinterpretados. Y cumplir con los estándares mínimos que la tarea museológica tiene, poder generar un acceso al material, generar proyectos de investigación, y difundir este patrimonio, que es un patrimonio de todos pese a que forma parte de un espacio privado como es el Monasterio Benedictino. Este patrimonio, como el de cualquier museo, tiene que estar mediado por la participación de la comunidad; y el acceso tiene que estar garantizado”, remarcó Cocchi en aquella oportunidad.
Si bien estoy solo en el Museo, diría que no estoy en soledad. Por ejemplo, el guion de la Muestra, fue trabajado con Ingrind de Young, que es una antropóloga que conoce muy bien Los Toldos, porque ha hecho muchos trabajos de investigación acá, inclusive su tesis. También nosotros hemos desarrollado un vinculo muy especial con algunos sectores de la comunidad, que nos ha permitido introducir a otras personas en el mundo del Museo. Así surgió el Proyectos “Memorias en Movimiento”, con el Instituto de Formación 60, que tenia como objetivo crear recursos pedagógicos para llevar al aula. Esos alumnos conocieron el Museo, no como visitantes sino como interlocutores. Este es el sentido que queremos marcar. Las intervenciones de diferentes sectores de la comunidad enriquecen el Museo, y lo potencian.